El Naghol
El Naghol, ‘el buceo en la tierra’.
Nos encontramos en Oceanía, mas concretamente en la zona del Pacífico Sur que se conoce como la Melanesia. Esta área geográfica se distribuyen 22 subregiones geográficas, em una de las 4 áreas pertenecientes a Oceanía se localizan 5 países, algunos desconocidos para muchas personas: Fiyi, Papúa Nueva Guinea, Islas Salomón, Nueva Guinea Occidental y Vanuatu. nuestro destino de hoy.
El archipiélago de Vanuatu, se localiza al este de Australia, noroeste de Nueva Caledonia al oeste de Fiyi y al sur de las Islas Salomón, se conocía antiguamente en su época colonial por Nuevas Hébridas lo forman un total de 83 islas de origen volcánico donde encontramos calderas activas de forma ininterrumpida como la del Montse Yasur que sin pausa, desde hace mas de 800 años se encuentra en erupción.
Alguna de las islas de este archipiélago, son el rincón proferido pro muchos submarinistas para poder realizar esta apasionante práctica deportiva donde, además de la belleza de sus fondos, si la suerte nos sonríe, podemos practicarlo con el llamado ‘guardián de la laguna’, nos estamos refiriendo a un mamífero muy particular el Dugong conocido también como ‘vaca marina’ del que hablaremos en otro artículo, encontramos un número considerable de tribus que habitan estas pequeñas islas y que todavía mantienen su esencia más ancestral de su forma de vida y de sus rituales. Hoy nos vamos a centrar en uno de ellos.
Este archipiélago tuvo presencia española haca muchos años y todavía algunas de sus islas, conservan nombres castellanos como la Isla de Pentecostés.
Esta isla del norte, delgada como un lápiz, de unos 65 km de largo y menos de 17 km de ancho, se encuentra a una hora de vuelo desde Port Vila, está salpicada de pueblos y naghols o sitios de buceo en tierra. Esta costumbre conocida como “gkol” es la práctica más espeluznante de todo el Pacífico Sur, y una de las más extrañas del mundo. Para asegurar una cosecha exitosa de ñame, los aldeanos construyen laboriosamente torres de postes y árboles jóvenes y los atan a árboles altos con enredaderas. Estas torres se construyen en incrementos de hasta 100 pies de altura.
Luego, un aldeano elige sus propias enredaderas de liana que están bien envueltas alrededor de sus tobillos. Asciende a la torre y todo el procedimiento se detiene mientras todos los ojos se centran en el buzo. Luego, en un verdadero acto de fe, el ‘cisne’ se lanza desde la torre. Si todo se calculó correctamente, solo la parte superior de su cabeza rozará el suelo simbólicamente fertilizando la cosecha de ñame. Esta práctica no es solo para asegurar una buena cosecha, sino que sirve como derecho de paso y señal de valentía. Este ritual solamente lo practican los hombres, y los niños circuncidados al cumplir 8 años pueden unirse al ritual.
Este ritual, sin lugar a dudas es el origen de una actividad que llega a nuestros días en forma de deporte extremo. Ya en 1979, un grupo de británicos locos de la Universidad de Oxford hizo el primer salto en bungee, con una cuerda de nailon en lugar de enredaderas. Pero en 1988, A.J. Hackett y Chris Allum, abrieron el primer sitio de salto comercial en Ohakune, un pequeño pueblo agrícola localizado cerca del Monte Ruapehu uno de los volcanes que forman el Tongariro National Park enNueva Zelanda y que como curiosidad, este pueblo se denomina capital mundial de las zanahorias, dando así nacimiento a la manía comercial por este deporte extremo.
Aparte del buceo con ñame, Pentecostés es un paraíso para los excursionistas con viajes a cascadas, ruinas y pueblos aislados…. Un lugar ancestral que merece la pena conocer.
Imágenes
Video: Land Divers | National Geographic