Nuestros Viajes a Nueva Zelanda
Información del Destino
Aotearoa. El país de la larga nube blanca
Apodadas “Aotearoa” (la tierra de la gran nube blanca y larga) por los maoríes, a estas islas se las ha considerado como uno de los países más bonitos del planeta, donde encontramos parajes que parecen sacados de un mundo de fantasía, localizándose en ellas gran parte de los paisajes más bellos y vírgenes de la tierra, formando una colección de lugares que son difíciles de clasificar, como caudalosos ríos con de aguas de color turquesa, una playa con enormes rocas esféricas esparcidas por su arena, una burbujeante piscina como si de una copa de champagne se tratara, una playa escondida tras una roca en forma de un arco que parece la entrada a “otro mundo”, un agreste paisaje volcánico convertido en el reino de Mordor, glaciares ancestrales o fiordos con mil impresionantes cascadas y todo en estado puro sin prácticamente influencia humana.
En este país que con orgullo exhibe su naturaleza salvaje, exuberante e imponente en todas sus expresiones, desde las altas cadenas montañosas con nieves eternas que forma la cordillera de los Alpes del Sur, hasta las playas amables de arena en la isla norte. Se localiza geográficamente al este de la gran Australia y en un extremo del área de la Polinesia, lo que propició que sus primeros pobladores, los maoríes, llegaran entre las centurias del 800 al 1300, para con posterioridad, convertirse en una colonia inglesa.
Información Práctica
Nombre del País:
Nueva Zelanda
Capital y Forma de Gobierno:
Wellington. Forma de gobierno: Monarquía Parlamentaria
Moneda
Dólar Neozelandés (NZD)
Idioma Oficial
Inglés y Maorí (El maorí lo habla principalmente la comunidad maorí)
Superficie,
Superficie 268 838 km²
Población y Densidad:
Población 4.886 millones hab. (2018) • Densidad 18,2 hab./km²
Pasaporte y Visados:
Vacunas:
Electricidad:
Zona Horaria:
Puntos de Interés
Auckland
Capital económica de Nueva Zelanda, Auckland es la ciudad más poblada del país. Ubicada a menos de media hora de encantadoras playas y rodeada por más de 50 hermosas islas, esta ciudad cuenta con tres puertos, dos montañas y un clima que se mueve al ritmo de la cultura Polinesia. Además, la ciudad se asienta sobre los cráteres de 48 volcanes extinguidos que hoy han sido aprovechados para zonas de recreo con magníficas vistas de la ciudad y sus alrededores.
Rotorua
Conocida como la Ciudad del Azufre por su intensísima actividad termal, Rotorua cuenta con una amplia región de baños de lodo medicinal y vapor, así como lagos sulfurosos. Famosa por sus enormes cabañas y lagos, Rotorua ofrece una de las mejores pescas de trucha de todo el mundo, además de ser el centro de la cultura maorí del país.
Parque Nacional Tongariro
Es el más antiguo del país. Situado en el centro de la isla del norte, este parque destaca principalmente por su exuberante vegetación, una meseta desértica y lagos centelleantes entre montañas de lava, así como imponentes conos volcánicos cubiertos de nieve. Los maoríes consideran este parque un lugar sagrado y místico que actualmente cuenta con tres volcanes activos: Tongariro, Ngauruhoe y Raupehu. Todos ellos presentes en la mitología maorí.
Parque Nacional Abel Tasman
Ubicado en la Isla sur, su visita es imprescindible. Esta reserva natural de frondoso bosque situada junto a playas paradisíacas (¡de agua bastante fría, eso sí!) es un pedazo de paraíso en la tierra al que únicamente se puede acceder a pie y/o en barco. Entre las actividades más populares que se pueden practicar en Abel Tasman encontramos el trekking, el kayak o el avistamiento de focas.
Parque Nacional Westland (glaciares Franz Joseph y Fox)
De sus orígenes altos en los Alpes del Sur, el glaciar Franz Joseph desciende profundamente en la selva tropical del Parque Nacional de Westland de una altura de 2.700m por encima del nivel de mar a los 240m en tan solo 11 kilómetros, lo que lo convierte en el glaciar más escarpado y rápido que se puede visitar. A pesar de haber disminuido considerablemente en los últimos años, merece la pena. Una de las mejores actividades de la zona, si te lo puedes permitir, es el heli hike. Para los que no lo hayáis probado, consiste en sobrevolar con un helicóptero la zona, aterrizar dentro del glaciar y, una vez allí y perfectamente equipados, realizar una caminata sencilla observando las formas caprichosas que forma el hielo. El glaciar Fox no se queda atrás. Muy cerca de él tenemos el lago Matheson, uno de los más fotografiados de Nueva Zelanda, donde en los días despejados podemos ver reflejado el Monte Cook.
Parque Nacional Monte Cook
La joya del país. Sus lagos color esmeralda, así como sus montañas inacabables y glaciares de película nos dejarán con la boca abierta. Esta zona natural protegida forma parte del conjunto llamado Te Wahipounamu, Patrimonio de la Humanidad. Muchos de sus paisajes se pueden disfrutar sin tener que esforzarse demasiado. Por ejemplo: en menos de 2 horas de caminata en llano se llega hasta el lago glaciar a los pies del monte Cook.
Además, los fans de la trilogía cinematográfica de El Señor de los Anillos podrán reconocer en el Monte Cook al doble del monte Caradhras en la ficción, también conocido como El Cruel o El Cuerno Rojo.
Títulos aparte, este parque nacional cuenta con algunos de los paisajes más espectaculares de Nueva Zelanda.